Liliana Heer

El comienzo
Presentación

Reseñas
Entrevista


<

©2003
Liliana Heer

 

 


 

 

 

 

 

 

Ediciones
Paradiso, 2016

 

Diario de viaje de Pretty Jane

La música cava el cielo.
Charles Baudelaire

 

Neblina inglesa en barrio porteño
sensaciones fortalecidas de bruma
el día es tan hermoso
que lo cortaría por la mitad
y un corazón no sabe
de mitades
es fruta que al comerse
sangra entera.

 

El punto de partida
es noción imprecisa
silueta de un paisaje perdido
hondonadas, vitrales
sol meridional.

 

Salir en la mañana ahumada
con la eficacia lerda
de quien olvida las llaves
en casa de un extraño.

 

Untarlo todo de sospechas
rumores de eucaliptus.
Opacidad, transparencia
sumar arpegios
percibir la ruptura mineral
el ansia, la vecindad.

 

La voz confiesa
deriva, conjetura
se detiene en una imagen
la línea del mentón
el parecido.
Duda
pero por sobre todo
canta, alumbra
parpadea.

 

Incrustación
ahí donde algo fluye
pocos trazos
gestos menores
la faena es otra
Pretty Jane
no olvides.

 

Cada labor
multiplica la agonía
memoria obtusa
nadie dispuesto
a conceder el don
de tanto ombligo.

 

Los colores infectan
fuego nevado
sucesión de metales
silogismos
el blanco venga
a baldear su eficacia
a comer lentamente
lo confuso
el peso de lo falso.

 

No me mire la mano derecha
si me vigilan, no puedo volar
me falta algo
una palabra hurtada al sonido
un recreo
el desván de la inspiración
se hace fiasco
turbia zurdez
lana empanada en tibia algarabía.

 

Elegir el gris
agua de lluvia
un equilibrio alto
no muy tenso
volver al carbón de leña
diluir, huir
del magma espeso
las figuraciones.

 

Primero el hurto
después la velocidad
cuídate de las moradas subterráneas
Pretty Jane
hay pasadizos ciegos
el pie resbala hacia sí mismo
se da de narices
con la eterna.

 

----

Noé Jitrik

En Diario de viaje de Pretty Jane, hay poemas que empiezan con verbos en infinitivo y poemas que tienen sintagmas más amplios, que van en otra dirección. Los verbos en infinitivo podrían ser un resto de cierta voluntad de racionalidad, porque el infinitivo es siempre una manera de presentar un sentido. ¿Quién fue el más racional de los dos, Liliana o Guillermo? No lo sé, pero, en ambos casos, lo lírico sería una tendencia que a mí me parece sentir. Hablo de cierta musicalidad y esa musicalidad, que está en todos los poemas, me hace recordar la forma de la cantata. La cantata es la continuidad de temas o de fragmentos con una unidad secreta. La estructura de la cantata me permite entender el flujo que tiene este libro, la razón por la cual llaman a todo el conjunto poema en singular, como si fuera un solo poema, una sola voz.
Al mismo tiempo, casi todos los fragmentos terminan en palabras graves. ¿Qué es la palabra grave si la reproducimos con la voz? Es un descenso suave, es una puerta abierta a un significado posible, es algo que tiende a tratar de entrelazar, no de interpretar. De ahí una conclusión: con la poesía es un modo de entrega. Si la poesía no nos incita a esa entrega no hay ni lectura ni poesía.

-------


Prensa

Diario de viaje de Pretty Jane. Marcelo Cohen. OTRA PARTE

Gran improvisación poética. Gabriel Calderola. La Nación

Viaje a través de un nombre. Ruben H. Rios. Perfil